El poema "Hay almas que tienen azules luceros" de Federico García Lorca es una pieza melancólica y reflexiva que se incluye en su Libro de poemas (1921). En él, Lorca explora la diversidad de las almas humanas y, de manera particular, la suya propia, sumida en una profunda introspección.
Hay almas que tienen
azules luceros,
mañanas marchitas
entre hojas del tiempo,
y castos rincones
que guardan un viejo
rumor de nostalgias
y sueños.
Otras almas tienen
dolientes espectros
de pasiones. Frutas
con gusanos. Ecos
de una voz quemada
que viene de lejos
como una corriente
de sombra. Recuerdos
vacíos de llanto
y migajas de besos.
Mi alma está madura
hace mucho tiempo,
y se desmorona
turbia de misterio.
Piedras juveniles
roídas de ensueño
caen sobre las aguas
de mis pensamientos.
Cada piedra dice:
“¡Dios está muy lejos!”
Análisis del poema
"Hay almas que tienen azules luceros"
El poema se construye sobre el contraste entre diferentes tipos de almas:
* Almas con "azules luceros" y "mañanas marchitas": Estas almas parecen estar ligadas a una belleza etérea, a la inocencia y a recuerdos pasados que, aunque bellos ("azules luceros"), llevan consigo una carga de nostalgia y tiempo perdido ("mañanas marchitas"). Hay una sensación de algo que fue puro y que se ha ido desvaneciendo, guardando "un viejo rumor de nostalgias y sueños".
* Almas con "dolientes espectros de pasiones": En oposición, Lorca describe otras almas marcadas por el sufrimiento de pasiones intensas y desengañadas. La imagen de "frutas con gusanos" sugiere la corrupción de aquello que una vez fue deseable, y los "ecos de una voz quemada" evocan un dolor profundo y persistente. Son almas vacías de alegría, con "recuerdos vacíos de llanto y migajas de besos".
* El alma del poeta: Finalmente, el poema se centra en el alma del propio Lorca. La describe como "madura hace mucho tiempo" y que "se desmorona turbia de misterio". Esta madurez no es sinónimo de sabiduría o plenitud, sino de un cansancio existencial, una carga de pensamientos y misterios que la agobian. Las "piedras juveniles roídas de ensueño" que caen sobre sus pensamientos reflejan la desilusión y el peso de una realidad que despoja los sueños de su brillo. El verso final, y más desgarrador, "¡Cada piedra dice: 'Dios está muy lejos!'", revela un sentimiento de abandono, de ausencia de esperanza o consuelo divino, lo que subraya la profunda desolación del poeta.
El poema es un claro ejemplo de la sensibilidad de Lorca hacia el dolor y la melancolía, así como de su capacidad para plasmar paisajes interiores a través de imágenes potentes y evocadoras. Utiliza metáforas y simbolismo para explorar temas como el paso del tiempo, la desilusión, la nostalgia y la búsqueda de sentido en un mundo que a menudo se siente vacío.
Federico García Lorca:
El poeta de la "pena negra"
Federico García Lorca (1898-1936) es una de las figuras más insignes y queridas de la literatura española del siglo XX, miembro destacado de la Generación del 27. Su obra, que abarca poesía, teatro y prosa, está profundamente arraigada en la cultura popular andaluza, el folclore, el flamenco y las tradiciones gitanas, pero también se nutre de la vanguardia y el surrealismo.
Algunos de los aspectos más relevantes de su vida y obra incluyen:
* Andalucía como fuente de inspiración: Lorca nació en Fuente Vaqueros, Granada, y su tierra natal fue una constante fuente de inspiración. Sus paisajes, su música, sus mitos y sus gentes impregnan gran parte de su producción, especialmente en obras como el Romancero Gitano o el Poema del Cante Jondo.
Temas recurrentes:
La obra de Lorca se caracteriza por la exploración de temas universales como:
* La muerte: Presente de forma trágica y a menudo violenta, como un destino inevitable.
* El amor y el deseo: A menudo frustrados, imposibles o llevados al límite, con una fuerte carga de erotismo y represión.
* La frustración y la marginalidad: Lorca dio voz a aquellos que vivían al margen de la sociedad, ya sea por su condición social, su raza o su sexualidad, lo que resuena con su propia experiencia como homosexual en una España conservadora.
* La naturaleza y el simbolismo: Elementos como la luna, el agua, la sangre, los caballos o los gitanos adquieren significados simbólicos profundos en su poesía y teatro.
* La libertad y la opresión: La lucha por la libertad individual frente a las imposiciones sociales y morales es un eje central, especialmente en sus obras teatrales.
* Influencia del surrealismo: Aunque su obra tiene raíces populares, Lorca incorporó elementos surrealistas, especialmente en Poeta en Nueva York, donde explora la alienación y la deshumanización de la vida moderna.
* Teatro universal: Además de su poesía, Lorca es un dramaturgo fundamental con obras como Bodas de sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba. Estas tragedias rurales, que exploran la pasión, la honra, la esterilidad y la represión, siguen representándose en todo el mundo.
Trágico final:
Lorca fue asesinado al inicio de la Guerra Civil Española, en agosto de 1936, por sus ideas liberales y su homosexualidad. Su muerte lo convirtió en un mártir y en un símbolo de la represión franquista.
"Hay almas que tienen azules luceros" es un testimonio temprano de la profunda sensibilidad lírica de Lorca y de su capacidad para bucear en las profundidades del alma humana, presagiando la "pena negra" que impregnaría gran parte de su producción posterior
https://ciudadseva.com/texto/hay-almas-que-tienen/
«Poeta en Nueva York es sin duda el libro más importante y moderno de Lorca». Más aún, insiste Morelli, «su poesía marcó una profunda ruptura en la vida del poeta y constituyó una crítica feroz contra el modelo del sistema capitalista que margina a los pobres, los negros, a las criaturas de la naturaleza, en cuya herida se representaba el poeta, al tiempo que reclamaba justicia, libertad y el derecho al amor sin etiquetas”,
https://es.wikipedia.org/wiki/Poeta_en_Nueva_York
https://garcia-lorca.org/