domingo, 28 de julio de 2024

Los silencios comedidos, siempre a la espera del final de las tragedias...

 ¡Ay! De los silencios comedidos, 

siempre a la espera del final 

de las tragedias...

Resguardados en el ronroneo

de frívolas palabras indefinidas.


¡Ay! De las retóricas que llenan

los discursos indecentes del día,

pues ya no vale buscar

entre las continuas somnolencias

malheridas en el sopor de las esperas.

Y es, que nunca ha servido 

esperar en solitario,

vaguedades que no dan respuestas.

JDC. Juan Díaz Casares 

...La hipocresía ha alimentado la ola de racismo y agresividad que está aumentando en todos los países de la Unión.

Los intelectuales silenciosos de Europa se hacen responsables de la creciente ola de fascismo que se está apoderando de toda la Unión.

Horkheimer y Adorno escribieron estas palabras en 1941:

“El concepto mismo de Ilustración... contiene el germen de la regresión que está teniendo lugar hoy en todas partes. Si la Ilustración no abraza la conciencia de este momento regresivo, está firmando su propia sentencia de muerte. Si dejamos la reflexión sobre el lado destructivo del progreso a los enemigos del progreso, el pensamiento, cegado por el pragmatismo, perderá su capacidad…”

Estas palabras pueden repetirse ahora, si seguimos cerrando los ojos ante la realidad de decenas de miles de personas ahogadas en el Mar Mediterráneo y ante la realidad del Holocausto infligido al pueblo palestino...

https://ctxt.es/es/20240101/Firmas/45262/Franco-Bifo-Berardi-filosofos-silencio-genocidio-Israel.htm


Este poema de Juan Díaz Casares explora temas de silencio, desesperación y la futilidad de la espera pasiva. Aquí hay algunos puntos clave para entender el poema:

 * El silencio como opresión: El poema comienza con una expresión de dolor ("¡Ay!") hacia los "silencios comedidos". Estos silencios no son pacíficos, sino opresivos, llenos de una espera ansiosa por el final de las tragedias.

 * La vacuidad de las palabras: El autor critica las "retóricas que llenan los discursos indecentes del día". Estas palabras son "frívolas" e "indefinidas", carentes de significado real y incapaces de ofrecer consuelo o solución.

 * La desesperanza de la espera: El poema expresa una sensación de desesperanza ante la espera pasiva. El autor sugiere que esperar "en solitario" y por "vaguedades que no dan respuestas" es inútil.

 * La crítica a la inacción: Hay una crítica implícita a la inacción y a la complacencia. El autor parece lamentar la falta de acción y la aceptación pasiva de las tragedias y la injusticia.

 * El sopor de la espera: En el poema se describe "las continuas somnolencias malheridas en el sopor de las esperas". Esto nos indica que las esperas no son activas, sino que llevan a la apatía, y al conformismo.

En resumen, el poema es una reflexión melancólica sobre la naturaleza del silencio, la futilidad de la espera pasiva y la necesidad de acción ante la tragedia.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

El vértice del silencio

Me recreé en tu cielo ávido de auroras, vigías de madrugada en el ocaso de los sueños. Quise marchar vigilante  para no errar caminos, pero;...