viernes, 17 de mayo de 2024

Los Mercaderes del Templo


Que difícil es, recomponer
lo que el Tiempo deteriora
sin desmayo en las almas.
¿Que salida sin refugio
buscamos a la opresión,
donde cuerpos despojados
se abren a un gris muy cierto?

...Nuestros gritos, son repulsas 
 estremecen lo dispuesto,
donde aún, imperan reclamos
a nuestras ilusiones y sueños,
de esos viejos, anacrónicos,
Mercaderes del Templo.

JDC. Juan Díaz Casares 

En el templo encontró a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, y a los que cambiaban dinero allí sentados. Y haciendo un látigo de cuerdas, echó a todos fuera del templo, con las ovejas y los bueyes; desparramó las monedas de los que cambiaban el dinero y volcó las mesas. A los que vendían palomas les dijo: «Quiten esto de aquí; no hagan de la casa de Mi Padre una casa de comercio».
Juan 2:13-16
 
“Mi casa será llamada casa de oración y vosotros hicisteis de ella un centro de ladrones". Pero la realidad también es lo contrario de la religión, y el problema de nuestro mundo es que aquí los mercaderes son los dueños del templo.

La realidad es lo contrario de muchas cosas, desde la justicia a la lógica o la razón. Por ejemplo, es posible que una persona afirme categóricamente algo y lo contrario, y jure ser sincero en las dos ocasiones, con lo cual transforma los antónimos en sinónimos; o que sus actos contradigan sus palabras hasta en lo más sagrado y con tanta frecuencia que explique por qué, en el terreno de lo espiritual, la hipocresía tiene sus propias frases hechas: a Dios rogando y con el mazo dando; una cosa es predicar y otra dar trigo... Seguro que las dos valen para definir a gente que conocen y, desde luego, son una fotografía de todas esas personas en quienes están pensando. En la mitología cristiana, Jesús expulsa del templo, a latigazos, a los mercaderes, derriba “a todos los que vendían y compraban allí, y los bancos de los cambistas y las jaulas de los que vendían las palomas”, mientras les grita: “Mi casa será llamada casa de oración y vosotros hicisteis de ella un centro de ladrones". Pero la realidad también es lo contrario de la religión, y el problema de nuestro mundo es que aquí los mercaderes son los dueños del templo...

...Es curioso que en nuestras sociedades suelan llevar la bandera de la moral y presentarse como defensores de la fe los mismos que ejercen la usura, no practican la solidaridad y son la voz cantante de la avaricia. Más de uno con mando en plaza y que ha acabado en la cárcel por ladrón, lanzaba proclamas de ahorro, moderación y sacrificio...

...otros se oponen hoy a la subida del salario mínimo al mismo tiempo que ganan sueldos astronómicos con el periodismo o son cargos públicos que cobran cien veces lo que los jubilados cuyas pensiones se oponen a que se suban. Y mientras, tocan las campanas. Quien afirmó que no se podía estar a la vez en misa y repicando también nos engañó...


´https://www.infolibre.es/129_139653

Este poema de Juan Díaz Casares explora la dificultad de sanar las heridas emocionales que el tiempo inflige en el alma. A través de imágenes poderosas y un lenguaje evocador, el autor nos invita a reflexionar sobre la fragilidad humana y la búsqueda de esperanza en un mundo lleno de opresión y desencanto.
Análisis del poema:
 * El paso del tiempo y el deterioro del alma:
   * El poema comienza con una afirmación contundente sobre la dificultad de "recomponer lo que el Tiempo deteriora". El tiempo, personificado como una fuerza implacable, deja su huella en el alma, causando dolor y desgaste.
 * La opresión y la búsqueda de refugio:
   * El autor plantea la pregunta de qué salida buscamos ante la opresión, un sentimiento que se extiende a lo largo del poema. La imagen de "cuerpos despojados" sugiere una vulnerabilidad extrema, una pérdida de identidad y esperanza.
   * El "gris muy cierto" evoca una realidad sombría y desoladora, donde la alegría y la vitalidad se han desvanecido.
 * La protesta y la lucha por los sueños:
   * Los "gritos" representan la repulsa ante la injusticia y el sufrimiento. Son un clamor por la dignidad y la libertad.
   * A pesar de la adversidad, el poema mantiene viva la llama de la esperanza. Los "reclamos a nuestras ilusiones y sueños" son un recordatorio de que, incluso en los momentos más oscuros, la lucha por un futuro mejor continúa.
 * Los "Mercaderes del Templo":
   * Esta frase evoca una imagen bíblica de corrupción y abuso de poder. En el contexto del poema, estos "mercaderes" podrían representar a aquellos que explotan y manipulan a los demás, robándoles sus sueños y esperanzas. La palabra anacrónicos, indica que son personas que pertenecen a tiempos pasados, y que siguen usando metodos antiguos, para obtener sus fines.
Temas clave:
 * La fragilidad humana y la capacidad de resistencia.
 * La lucha contra la opresión y la injusticia.
 * La importancia de mantener viva la esperanza y los sueños.
 * La crítica a la corrupción y el abuso de poder.
En resumen, el poema de Juan Díaz Casares es una reflexión profunda y conmovedora sobre la condición humana. A través de su lenguaje poético y sus imágenes evocadoras, el autor nos invita a mirar hacia nuestro interior y a encontrar la fuerza para seguir adelante, incluso en los momentos más difíciles.




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